Y de repente.. ¡Una Novela!...
![](http://1.bp.blogspot.com/_2ppoFkFHfYs/SykSi9DGXbI/AAAAAAAAAC8/2FTbBmongF4/s200/El+tiempo+entre+costuras.jpg)
Efectivamente: de repente y en medio de la crisis y de los problemas de todos los días: la familia, los niños y sus facturas del móvil, la hipoteca del coche y de la casa, el seguro del coche y de la casa, la lavadora que se estropea y el ordenador que te deja colgado…en medio del petardo de tu jefe y de las benditas cenas de Navidad y de los planes para fin de año y de los pelmas de tus compañeros de oficina…en medio de la absoluta mediocridad de nuestra rutina diaria…de repente aparece una Novela, con mayúsculas.
Una Novela que te atrapa desde la primera línea y te transporta a épocas lejanas: tiempos de mujeres elegantes y refinadas; tiempos de hombres con coraje y dignidad; tiempos de amantes que se encuentran, se cruzan, y se desencuentran, entrelazándose en una historia de amor y lujo como las de antes; tiempos de aventuras, viajes, paisajes exóticos, hoteles, barcos, trenes, espías, hijos secretos y padres reencontrados, herencias y estafas y Costura, Alta Costura de la de verdad: con sus pruebas, sus glasillas, sus hilos flojos y sus entretelas…y sus clientas rebosantes de estilo y glamour.
Maria Dueñas ha sabido hilvanar en su sorprendente primera novela un relato fascinante que engancha desde la primer página y te sumerge en el mundo color sepia de nuestros abuelos: mientras te entretiene con la historia de su protagonista –una intrépida como atractiva modista de la postguerra española- te ilustra con todo detalle un oscuro episodio de nuestra historia más reciente (y más desconocida).
Y una Novela así se agradece: una novela sin tesis, sin falsas moralejas, sin discursos apocalípticos y éticos…una novela cuya única pretensión es sólo eso, novelar, es decir: entretener. ¡Y de que manera!
Enhorabuena Maria: puntada a puntada has rematado una de las mejores novelas de este año 2009. Palabra de Modista.
“El Tiempo entre Costuras”, de Maria Dueñas. Editorial Temas de Hoy.
Lorenzo Caprile
No hay comentarios:
Publicar un comentario